miércoles, 31 de diciembre de 2014

Carta abierta a Fernando Torres

Hoy que vuelves, Fernando, sólo quiero recordarte que para nosotros nunca te fuiste. Que sí, que sí...que jugaste de rojo, de azul e incluso en un equipo italiano, pero tú siempre fuiste de los nuestros. Nunca dudaste en atarte una bandera de tu Atleti, para que nadie dudase a quien pertenecía tu corazón.

A muchos les jodía, y perdonen por la expresión, que fueses tú el que hizo campeón a nuestra selección aquella vez ¡Qué bonito fue Fernando! No obstante te siguieron criticando, la razón es simple: Nunca te dejaste desteñir con otros colores. Rechazaste incluso el más mínimo rumor cuando algunos, aunque nunca lo admitirían, querían verte de blanco.

No obstante tengo que decirle, Fernando, que aquí te estábamos esperando, que nos faltan tus palabras de cariño hacia el club de tu vida y que siempre estuvimos ahí, nunca en la sombra. Que todos nosotros te sentimos casi como un hijo o un hermano, de esos que siempre defiendes incondicionalmente pase lo que pase.

Que las cosas aquí han cambiado, de repente somos un equipo de élite, pero yo te digo, Fernando, que somos los de siempre.  Que si ganamos animamos, si perdemos rugimos. Tú bien conoces a quien tenemos al mando, tú bien sabes quién es el salvador de este equipo...y yo no sé cómo lo ha hecho Fernando, pero ahora somos campeones.

¿Sabes? En el fondo todos sabíamos que volverías, incluso tú. Porque, amigo, a veces el dinero no lo es todo, porque el mejor combustible para un jugador siempre es sentirse querido, y ¿Dónde te van a querer más que en tu casa?


Ahora que has vuelto a la familia sólo me queda desearte suerte, desata todo el fútbol que llevas dentro y demuestra a todos lo que nosotros ya sabemos. Porque eres grande Fernando, y siempre serás nuestro Niño.


1 comentario: